¿Qué es el Omega 3? ¿Cuáles son sus beneficios para nuestra salud?
En este artículo explicaremos qué es y para qué sirve el Omega 3. Además de conocer sus beneficios para la salud, también te brindaremos algunas estrategias para adquirirlo mediante la alimentación y de qué formas impacta en el cuidado de tu piel.
El Omega 3 es un ácido graso esencial reconocido por sus beneficios para la salud, principalmente para el correcto funcionamiento cerebral y del sistema cardiovascular.
Este nutriente crucial se encuentra en varias formas, siendo los más destacados el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA), ambos fundamentales para el desarrollo y el mantenimiento de diversas funciones del organismo humano.
Beneficios para la mente
El Omega 3 desempeña un rol fundamental en la salud mental y cognitiva. Varios estudios han demostrado que este ácido graso, especialmente el DHA, conforman una parte clave de las membranas celulares en el cerebro y pueden mejorar su funcionamiento.
A continuación destacamos algunos de sus beneficios más importantes en cuanto a su consumo en distintas etapas de la vida.
En etapas tempranas de la vida el DHA es necesario para el desarrollo de nuestras funciones cognitivas, sobre todo en momentos de aprendizaje y también puede mejorar la memoria en adultos mayores. Además de ser de gran ayuda para prevenir el declive cognitivo en la tercera edad, evitando las enfermedades como el alzheimer.
También se asegura que al consumir Omega 3, a cualquier edad, tenemos menos riesgos de contraer trastornos mentales como la depresión, la ansiedad y la esquizofrenia.
Beneficios para el corazón
El Omega 3 es muy beneficioso en la salud cardiovascular, protegiendo al corazón y a los vasos sanguíneos.
Especialmente el EPA ayuda a reducir los niveles de triglicéridos en sangre, ideal para prevenir enfermedades cardiovasculares.
Al consumir Omega 3 logramos disminuir significativamente la presión arterial, especialmente bueno para personas que sufren hipertensión, reduciendo el riesgo de accidentes cerebrovasculares y/o enfermedades cardíacas.
El EPA y el DHA tienen propiedades antiinflamatorias, por lo que ayuda a reducir la inflamación en el cuerpo, lo cual es una prioridad para disminuir el factor de riesgo en personas con enfermedades cardíacas.
Las mejores fuentes alimenticias de Omega 3
Para obtener los beneficios mencionados, consumir suficiente Omega 3 mediante la alimentación es fundamental. Por lo que a continuación introducimos algunas de las mejores fuentes alimenticias:
El principal alimento a considerar es el pescado, que cuente con un buen nivel de aceite como el salmón, las sardinas, la trucha y el arenque, siendo todos excelentes fuentes de EPA y DHA. En caso de que la textura del pescado no te agrade o si eres vegetariano, puedes consumir directamente los suplementos de aceite de pescado.
Las semillas de chía y lino son ricas en ALA, un tipo de Omega 3 que el cuerpo convierte en EPA y DHA en menor medida. También hay suplementos que concentran el aceite de estas semillas, como por ejemplo “Chiacaps”.
En cuanto a frutos secos, las nueces, especialmente las provenientes del nogal, y las almendras son buenas fuentes de ALA.
Otros tipos de Omega: 3, 6 y 9 y la importancia del balance en tu dieta
Además del Omega 3, existen otros ácidos grasos esenciales siendo el Omega 6 y el Omega 9 también importantes para la salud general.
En la dieta moderna occidental, el más consumido de estos tres es el Omega 6, ya que se encuentra en aceites vegetales como el de maíz y de soja, siendo los que se utilizan cotidianamente para cocinar y condimentar ensaladas y comidas.
Muchos no lo saben, pero esto puede provocar inflamación si no se compensa adecuadamente con Omega 3 y Omega 9. Por los que mantener un equilibrio adecuado entre estos tres ácidos grasos esenciales es fundamental para tener una buena salud.
Tips para Aumentar el Omega 3 en tu Alimentación
Si deseas aumentar tu consumo de Omega 3, te dejamos cuatro tips para incorporarlo a tu vida diaria:
- Intenta consumir pescados grasos al menos dos veces por semana para aumentar tu ingesta de EPA y DHA.
- Agregar semillas a tus comidas, ya sean de chía o lino son una buena opción. No solo le darás un sabor nuevo a tus comidas, sino también un breve crocante. Se recomienda agregarlas a tus cereales, ensaladas, yogures, batidos o la preparación de tus panes o tortas, para obtener una dosis extra de Omega 3.
- Ten en cuenta que aceites utilizas en tus preparaciones, como mencionamos en el apartado anterior, los más comunes son los de maíz y soja, los cuales te aportarán Omega 6. Pero para lograr un buen equilibrio con los demás omegas, puedes consumir aceite de oliva, el cual es una gran fuente de Omega 9, en conjunto con alimentos que contengan el Omega 3 podrás lograr una dieta balanceada.
- Si tienes dificultades para obtener suficiente Omega 3 a través de la dieta, no olvides considerar los suplementos de aceite de pescado, lo más probable es que tu médico o nutricionista te los recomiende.
El Omega 3 y los cuidados de la piel
Este aceite natural ofrece varios beneficios para la piel, contribuyendo a su salud y apariencia de varias maneras.
Lograrás reducir la inflamación cutánea, por sus características antiinflamatorias. Esto beneficia principalmente a personas con acné, la rosácea o la dermatitis. Por otro lado, el Omega 3 es un gran hidratante natural, ayuda a fortalecer la barrera de la piel los que hace que se retenga la humedad, ayudando a quienes sufren de piel seca y descamación.
Es un gran creador de colágeno. Siendo esta una proteína esencial que ayuda a mantener la firmeza y elasticidad de la piel, reduciendo la aparición de líneas finas y arrugas.
Algunos estudios aseguran que los ácidos del Omega 3 pueden ayudar a proteger la piel contra los daños causados por la exposición solar excesiva. Lo cual puede reducir el riesgo de envejecimiento prematuro y cáncer de piel.
Y finalmente, mejora la apariencia general de la piel, manteniéndola radiante y sana, ya que estimula una buena circulación sanguínea y nutrición de las células cutáneas.
En conclusión, incorporando alimentos ricos en Omega 3 en tu dieta, podrás mejorar significativamente tu salud mental, cardiovascular y la apariencia de tu piel gracias a sus efectos antiinflamatorios, hidratantes y estimulantes del colágeno. Estos beneficios impactarán en tu día a día y también a largo plazo en tu bienestar general.
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